La LGBTI-Fobia

Aversión a todo lo No-Heteronormativo

La Homofobia, se podría describir cómo el miedo, el rechazo y la aversión, etc, a todo lo relacionado con lo No-Heterosexual, dentro de la sexualidad humana normativa y definida rigidamente; negando la existencia de la diversidad sexual, cuando se sale de sus parámetros establecidos social y culturalmente. No teniendo en cuenta otros aspectos cómo el biológico, sinó los impuestos por el hombre a su parecer; con una alta carga de crencias religiosas especialmente. Esto, en el peor de los casos puede llevar al odio y por consiguiente a la violencia de cualquier tipo en contra de las personas que se definen cómo homosexuales, bisexuales y transexuales, en terminos generales.

Según la Real Academia de la Lengua Española (RAE), el termino Aversión significa: Rechazo o repugnancia frente a alguien o algo. Si bien, la palabra puede parecer dura y puede herir sensibilidades, hay algunas otras más fuertes que se relacionan con esta, ya sea odio, asco y fobia. Pero no estan muy lejos de la Homofobia, «curiosamente».

En psicología una fobia es un miedo persistente e irracional hacia un objeto, situación o actividad específicos…que da lugar a un deseo de evitarlo. El cual, suele conducir a la evitación o al afrontamiento con terror. (psicoactiva.com Diccionario de Psicología).

Partiendo de estas definiciones, tan variadas, aunque con un elemento en común el «rechazo» podríamos interpretarlo cómo el hecho de sentirlo hacia una persona no-heterosexual y la propia negación de serlo o poder serlo. Se habla mucho de la homofobia y realmente puede llegar a hacer mucho daño, en el ámbito escolar lo encontramos en el bullying, en el laboral el moving, en el familiar el «destierro», en el ambito social – cultural la privación de los derechos y en el campo personal la no-autoaceptación. Todo por motivo de la orientación afectiva sexual fuera de lo estándar y «natural». Se habla tambien, de la parte opuesta, cómo es la toleráncia, puesto que no se puede exigir entenderlo o aceptarlo, pero sí respetarlo.

Por otra parte, son distintas las maneras de sentir homofobia, entre las cuales encontramos tipologias tan variadas cómo lo que se enmarca en la diversidad sexual humana:

 

Homofobia cognitiva: es la concepción de la homosexualidad cómo una orientación antinatural y anormal, que va en contra de las normas establecidas, ya sea por la cultura, la religión o la sociedad.

Homofobia afectiva: la sensación de incomodidad y hasta sentir asco delante de una demostración de afecto por una pareja del mismo género.

Homofobia liberal: se «acepta» la homosexualidad, pero con la condición de que no se exprese abiertamente de cualquier forma y contexto.

Homofobia conductual: genera conductas de rechazo que motivan a insultar, discriminar y en casos extremos a agredir fisicamente o verbalmente a una persona no-heterosexual.

Lesbofobia: rechazo a las mujeres homosexuales . Hay que puntualizar que pueden estar sometidas o no a la discriminación por su orientación sexual y también por su género.

Bifobia: condenar a las personas que sienten atracción afectiva – sexual por ambos géneros.

Transfobia: discriminación a las personas que difieren de la correspondencia normativa entre el sexo biológico y la identidad de género o a las que llevan a cabo su re-asignación.

Plumofobia: condenar y discriminar a una persona que independientemente de su orientación afectiva – sexual, sea amanerado o amanerada, cuando sus rasgos y comportamientos no se correspondan con lo establecido a su rol de género.

(Definiciones basadas en: López, S. F. Homosexualidad y familia (2006). Ed. Grao).

Homofobia Internalizada: es preciso tener presente que la homofobia no siempre puede venir del exterior. Se trataría del rechazo propio, debido a la orientación afectiva – sexual contraria a la heteronormativa. La cuál, se expresa con gran malestar psicoemocional, pensamientos, emociones y conductas homofóbicas de la propia persona y hacia los demás; puesto que todos y todas hemos crecido en entornos que condenan y niegan la diversidad sexual.

La homofobia presenta una connotación más que de «fobia» alejándose de su similitud con el «miedo» a rechazo y tambien odio, lo que puede llevar a excluir, discriminar y hasta agredir.

Por tanto, es una actitud hostil que concibe y señala la orientación homosexual en definitiva la No-Heterosexual, cómo contraria, inferior, peor o anormal. Por consiguiente las personas que se identifican dentro de esta minoría para algunos y algunas son pecadoras, enfermas, malas, delincuentes, criminales, desviadas y desequilibradas. Todo esto en función del ámbito o los argumentos con que se prejuzgue.

 ¡La homosexualidad no es una enfermedad, la homofobia si!

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